Old Fashioned Week, un homenaje al primer cocktail de la historia
Hasta el domingo 14 de noviembre se celebra la Old Fashioned Week, semana que homenajea el clásico cocktail, que hizo historia en todo el mundo.
El cóctel más antiguo de la historia vuelve a ser protagonista en la Old Fashioned Week, que se celebra desde el viernes 5 al domingo 14 de noviembre.
En 1806, la revista The Balance and Columbia Repository de New York lo describía como una combinación de agua, azúcar, bebida amarga y licor; es por estas características que el Old Fashioned es ponderado como el primer cóctel de la historia.
Algunas voces expertas, consideran que el clásico trago fue creado por un barman del Pendennis Club de Louisville, en Kentucky. De hecho, es el cóctel oficial de Louisville, pero la popularización del Old Fashioned se le atribuye al coronel James E. Pepper, quien lo llevó al bar del hotel Waldorf-Astoria de New York. El mismo coronel James E. Pepper era propietario de una destilería de bourbon en esta ciudad.
Una de las versiones más icónicas del Old Fashioned es el Ron Old Fashioned, que se prepara con Havana Club, el auténtico ron de Cuba creado en 1878:
- 50 ml de Havana Club 7 Años
- 2 golpes de bitter aromático
- 1 cucharadita de azúcar blanco (o 12,5 ml de jarabe de azúcar)
- 1 espiral de piel de naranja
- 3 cubos de hielo
En un vaso de trago corto, mezclar el azúcar y el bitte, a continuación, agregar Havana Club 7 y volver a mezclar. Sumar el hielo y removerlo durante 20 segundos para enfriar la bebida.
Decorar con una espiral de piel de naranja.
El Havana Club 7 es de color caoba claro y brillante y contiene un aroma exquisito con intensas y complejoas notas de cacao, vainilla, cedro, tabaco dulce y frutas tropicales exuberantes.
En boca se presenta excepcionalmente rico y elegante. Una sedosa entrada conduce a un paladar equilibrado pero extraordinariamente complejo de cacao, vibrante y refinado, vainilla, caña de azúcar, castaña y sabores de frutas tropicales caramelizadas apoyados por especias dulces.
El final es intenso pero redondo y suave. Sus complejas notas de añejamiento se combinan con una nitidez que recuerda sus orígenes de caña de azúcar para dar un ron que es el orgullo de toda la tradición de Cuba.
